BERLÍN.- Reinhard Grindel, presidente de la Federación Alemana de Futbol (DFB), lamentó no haber apoyado de manera correcta a Mesut Özil luego de fotografiarse con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan y que acarreó un sinfín de críticas e insultos racistas hacia el jugador.
El dirigente señaló en su momento que el jugador y su compañero Ilkay Gundogan se dejeron “explotar” por Erdogan por motivos políticos. Y luego de la eliminación de Alemania en Rusia 2018, Grindel pidió a Özil que diera una “respuesta” por la fotografía. Posteriormente señaló que sus palabras su usaron “para eslóganes racistas”.
“Como presidente, con perspectiva, habría dicho sin ninguna ambigüedad lo que es una evidencia para mí y para toda la federación: cualquier forma de acoso racista es insoportable, inaceptable e intolerable”, señaló en un comunicado.
Y reiteró de manera categórica el que se le vincule con el racismo. “Lo descarto enfáticamente, en cuanto a la federación y en lo personal”. Esto luego de que fuera señalado de manera directa por el mediocampista de origen turco, que anunció su salida de la selección alemana tras considerarse víctima de insultos.
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