MOSCÚ.- Los futbolistas Pável Mamáyev (Krasnodar) y Aleksandr Kokorin (Zenit) fueron detenidos por la policía rusa acusados de vandalismo luego de agredir a dos funcionarios y un conductor este lunes en la ciudad de Moscú.
Ambos jugadores fueron citados a declarar, pero al no presentarse se dio la orden de búsqueda para que comparecieran por los hechos violentos de los que se les acusa, mismos que podrían acarrearles hasta cinco años de cárcel al considerarse un delito grave.
La condena para Mamáyev podría ser aún mayor, ya que según señala ‘Eurosport’ “por un segundo ataque contra el chófer de un coche perteneciente a una presentadora de la televisión rusa, el futbolista podría recibir otros dos años de pena”.
Debido a esto, el abogado del ex seleccionado ruso busca que la agresión protagonizada por su cliente sea considerada como un acto de vandalismo menor, lo que es castigado como una simple falta administrativa y penalizado con una multa.
Debido a este escándalo, los clubes de ambos jugadores estaría considerando rescindir los contratos que los vinculan, además de que los dos podrían verse privados de jugar de manera indefinida en algún equipo ruso o en la selección nacional.
Tanto ha indignado este caso que ha sido condenado por el Kremlin, el Gobierno, la Cancillería, la Duma, el Ministerio de Deportes, sus clubes y leyendas del deporte ruso, además de unánimemente por la prensa deportiva y de información general.
