La cancha del Estadio Azteca no pudo aguantar más, por lo que finalmente se decidió levantar todo el pasto híbrido que se había colocado hace unos meses, para ajustar en la base e instalar un nuevo césped.
Luego del tropiezo que se tuvo con la cancelación de la NFL, la administración del recinto, los dueños, así como el América y el Cruz Azul tomaron la opción de comenzar casi desde cero para que los juegos de Liguilla se puedan celebrar de la mejor manera, y no sufrir en los cotejos.
El diario Récord sostiene que se ajustará para que el drenaje pueda ser más favorable, pues esta situación no dejó que el césped agarrara y estuviera prácticamente todo el tiempo maltratado, para después instalar uno nuevo, pero también híbrido.
La fuente que consultaron indica que se trabaja duro para que probablemente se tenga listo el campo dentro de una semana, justo cuando la Liguilla esté arrancando en el Coloso de Santa Úrsula.
Si el América no hubiera movido su partido para cerrar la campaña en Toluca, los trabajos no hubieran podido realizarse, por lo que la decisión de cambiar de estadio fue en ese sentido acertada por los directivos.
