Ciudad de México. Las lágrimas de Gianluigi Buffon lo decían todo: Italia quedaba fuera de la Copa del Mundo de Rusia 2018 y se consumaba una de las tragedias más grandes en la historia del futbol mundial.
¿Qué habrá pasado por la mente de Paolo Rossi, DinoZoff, Fabio Cannavaro, Alessandro del Piero, Francesco Totti, entre muchas otras grandes figuras del futbol italiano que alguna vez levantaron una Copa del Mundo y se hicieron grandes?
Una muerte anunciada que tuvo su culminación en el duelo de vuelta de la reclasificación ante Suecia, un país que no le sienta bien a los italianos, pues el último mundial al que no asistieron fue precisamente Suecia 1958.
El estadio San Siro, repleto de aficionados italianos que tenían la esperanza de meterse al mundial, vieron caer a 11 gladiadores que fueron incapaces de remontar un 1-0, que no pudieron vulnerar una defensa que estuvo bien atrás, defendiendo su gol como verdaderos vikingos.
Atrás quedaron 60 años de historia mundialista, en los que consiguieron dos títulos y dos subcampeonatos y se convirtieron en una de las selecciones más respetadas y exitosas de todos los tiempos, capaz de ganar títulos sin la ayuda de una dictadura, como la de Benito Mussolini, en 1934.
Luego de esa noticia el mundo quedó paralizado, no podían dar crédito a lo sucedido ese 13 de noviembre de 2017. Los futbolistas italianos pidieron perdón por lo sucedido, se disculparon por haber atentado contra la tradición, por haberle faltado al respeto al futbol y por privar de ver a una de las escuadras más queridas en el planeta.
Buffon, el menos culpable de esto, perdió la oportunidad de convertirse en el único futbolista con participación en seis mundiales. Será en otra vida, ya que el arquero puso fin a su etapa con la Nazzionale. El mundo y el futbol estuvieron de luto y lo estarán hasta que la Selección Italiana vuelva a estar en una Copa del Mundo.
